jueves, 12 de junio de 2014

todo depende de las sensaciones y las sensaciones son muy buenas

           Es la opinión del defensa central catalán de la selección española, G. Piqué, al hablar sobre la forma de afrontar el Cto. Mundial de Fútbol 2014. Van a afrontarlo de la misma manera: “no cambia nada, es verdad que llevamos la estrella en el escudo, pero de cara al Mundial las sensaciones son las mismas. Quizás los otros equipos nos tengan más respeto, pero tenemos un buen equipo y podemos aspirar a todo: “todo depende de las sensaciones y las sensaciones son muy buenas”.
            Pero qué pasa cuando las sensaciones no son buenas?. Ya no se puede rendir al máximo nivel? Ya no se puede competir con garantías?. Evidentemente esto no es así, porque una de características del alto rendimiento es precisamente la tolerancia a las adversidades que tienen los deportistas excelente.

         Si estuviéramos a merced de las sensaciones, las cosas escaparían a nuestro control, seríamos incapaces de planificacar acciones, de tomar decisiones eficientes y nos encontraríamos frente a un modelo de determinismo desvinculado de la voluntad sin posibilidades de realizar comportamientos deliberados.