Son declaraciones realizadas por el tenista R. Nadal, una
vez disputada la final del torneo
Abierto de Australia frente a Djokovic con resultado negativo, y publicadas en
el diario El País (31/01/12).
“Estoy cambiando y todo cambio cuesta, necesita tiempo, pero esta es una de las derrotas más
felices de mi carrera, ya que siempre busco superarme y aquí lo he conseguido.
He sido bastante mejor que en 2011: me he llevado al límite, la pasión y la ilusión
estaban ahí, y después de un tiempo en el que había sufrimiento sin disfrutar,
he sufrido disfrutando”.
Por otro lado señala que quiere aumentar el nº
de golpes ganadores y controlar el dónde y el cómo se deciden los puntos,
porque se ha dado cuenta de que si no decide él lo harán los demás.
Es un claro discurso lleno de criterios
relacionados con la excelencia: Un estilo motivacional orientado hacia la
mejora, autorreferenciado, con un afán de superación y con especial mención al trabajo duro, al sacrificio
y a la satisfacción, en el que
esfuero y éxito van de la mano, es
decir, son indiferenciados porque se busca la mejora por encima del resultado.