jueves, 2 de junio de 2016

la satisfacción vital, una de las claves del bienestar psicológico en el camino de la excelencia (I)

La satisfacción se puede definir como  “un sentimiento que genera una fuente de alegría, de placer, de gusto, o también como la realización de una necesidad,  de una meta, de un deseo o de una pasión”. El hecho de sentirse complacido con aquello que se realiza o se ha realizado, supone sentirse satisfecho. Es un placer armónico y equilibrado que se produce  en el  interior  del deportista.
Frisch (1994) asocia los términos de calidad de vida, bienestar psicológica y felicidad, con la satisfacción y hace una aproximación cognitivo-afectiva a la hora de definirlos. Desarrolla la teoría sobre la satisfacción vital, que hace referencia a la evaluación subjetiva de una persona en relación al grado mediante el cual ha conseguido sus metas o deseos, y ha satisfecho sus necesidades. Cuanto más pequeña sea la discrepancia percibida entre las aspiraciones y los logros de una persona, mayor será su satisfacción (Rosich, Alsinet y Casa, 2004).
         La satisfacción normativa se orienta hacia los demás, y se relaciona con la medida en que se agrada, se complace o se cumplen las expectativas que los demás tienen sobre nosotros,  que es lo que genera el sentimiento de satisfacción. Es muy importante señalar que la satisfacción vital guarda una estrecha relación  con la orientación motivacional personal, la motivación intrínseca y la competencia percibida de los deportistas.