En diferentes diarios locales de la ciudad,
al comentar en sus páginas el inicio de la temporada de la Real Sociedad de
Fútbol, S.A.D., y recogiendo las declaraciones de varios jugadores, se menciona como objetivo prioritario tener mayor regularidad en el juego; también
señalan, dentro de los objetivos, ser competitivos en cada partido.
Esto
supone que hay que trabajar en el
entrenamiento aquellos aspectos que desarrollan la consistencia y la fortaleza
mental a elevados niveles de rendimiento. Pero sobre todo, habrá que prestar
especial atención a aquellas cuestiones que están bajo el control de los
jugadores y, además, generar estrategias eficientes para controlar el impacto
de aspectos que no estén bajo su control.
En
este sentido, la motivación intrínseca, las funciones ejecutivas (autosupervisión,
memoria de tareas, planificación y toma de decisiones rápidas) y la fortaleza
mental, serán claves para alcanzar el propósito que se plantea en dichos
diarios. Evidentemente, es una parte esencial del entrenamiento mental
relacionada con el alto rendimiento y la excelencia, a la que habrá que prestar
especial atención durante la preparación de los partidos.