Escuchando las declaraciones en TVE 1 (26/06/12) del
seleccionador español de futbol,
V. Del Bosque, en relación al partido que van a disputar esta noche frente a
Portugal, pensaba en lo sencillo que puede ser cometer “errores no conscientes”
(autotrampa) en el afrontamiento de dicho partido.
Para motivar a los jugadores, señalaba que “era
el partido más importante de sus vidas y que todavía no habían hecho nada”.
Como ya hemos comentado en anteriores ocasiones, cambiar el grado de
importancia de los acontecimientos genera una mayor sentimiento de vulnerabilidad frente a los mismos. Además, minimizar
el esfuerzo y anular el valor que
supone alcanzar las semifinales, destruye las bases sobre las que se asienta la
posibilidad de anticipar
satisfacción por lo que se pretende conseguir.
También se señalaba
“el compromiso”de ganar el partido para honrar la memoria de dos
personas (jugador y entrenador) vinculadas al futbol recientemente fallecidas. Esto supone un
refuerzo extrínseco sobre algo que
no está bajo su control, que
genera un aumento de presión exógena y de ansiedad. Son los mismos errores de afrontamiento
que cometieron los jugadores y
técnicos de Athletic de Bilbao,
cuando disputaron la final de la Copa de la UEFA frente al Atlético de Madrid.
Desacertada orientación motivacional para afrontar el
partido de esta noche frente a Portugal, que disminuye las posibilidades del
equipo español, antes de comezar a disputarlo. Espero que los jugadores
reorienten su estilo motivacional personal y se mantengan centrados en la tarea y en los referentes intínsecos que
habitualmente utilizan. Es una de
las capacidades que les generará las
condiciones óptimas para desarrollar el excelente juego que habitualmente realizan, reforzará su confianza y aumentará sus posibilidades de alcanzar el campeonato.