miércoles, 6 de febrero de 2013

el talento de Messi se guarda en su mente


Son las conclusiones de una investigación realizada por científicos de la Universidad Británica de  Brunel, publicado por  eldiariovasco.com (05/02/12), en el que aseguran que los futbolistas más experimentados son capaces, cuando se les acerca un rival, de activar más áreas en sus cerebros que los jugadores más inexpertos, lo que les permite ejecutar movimientos con más éxito.
Según dicho estudio, publicado en el 'Journal of Sport and Exercise Psychology', los jugadores más experimentados logran controlar mejor sus reacciones instintivas, haciéndoles menos susceptibles a caer en los engaños del rival. En él, analizaron a 39 jugadores de fútbol, desde principiantes a semiprofesionales, a los que sometieron a un escáner cerebral por resonancia magnética y les mostraban imágenes de un jugador juvenil internacional corriendo hacia ellos con un balón. En ocasiones, este jugador realizaba una maniobra de engaño y los participantes debían decidir qué dirección tomar para evitar ser regateados. Los resultados demostraron que los jugadores con más experiencia estaban en una mayor armonía con las acciones y movimientos del oponente que los más novatos.
Los datos, extraidos por neuroimagen, mostraban claramente una mayor activación del área  motriz y de las estructuras relacionadas con el cerebro en los futbolistas expertos, en comparación con los novatos, cuando participan en una labor de anticipación relacionada con el fútbol. Asimismo Daniel Bishop, uno de los autores del estudio, señalaba: “Creemos que este mayor nivel de actividad neuronal es algo que se puede desarrollar a través de un entrenamiento de alta calidad, por lo que el próximo paso será cómo entrenar el cerebro para anticiparse a los movimientos del rival".
En nuestro caso,  como lo hemos hecho en anteriores ocasiones semejantes  y  mientras se resuelve dicho paso, proponemos como hipótesis de trabajo para la mejora de la anticipación decisional de los jugadores, lo siguiente:
a)     Quedarse con las 3-4 jugadas  más relevantes y eficientes de cada partido que se  haya jugado.
b)    Visionar acciones de jugadores de excelencia en las que se resuelve eficientemente e intentar memorizarlas.
c)     Entrenar  la capacidad de desarrollar el “sueño lúcido inducido” y de la Visualización.
d)    Jugar en la cabeza con posibles situaciones que  puedan ocurrir en los  partidos, es decir, con escenarios mentales anticipados (EMAs).
e)     Incorporar al PIC las posibles situaciones que se vayan a dar, en función del modelo táctico seleccionado, y operar con ellas mentalmente antes del partido, es decir, jugar varias veces el partido en la cabeza antes de disputarlo.
Hemos comprobado  de forma experiencial que, en aquellos jugadores que realizan este tipo de trabajo, se produce una mejora en su visión de juego,  en  la elección de las oportunidades más favorables durante el juego, en la velocidad decisional y en la confianza decisional.