martes, 22 de mayo de 2012

nada es tan bueno o tan malo como parece cuando sucede.


Es una interesante reflexión, relacionada con los reveses personales o las adversidades, comentada en un artículo de opinión relacionada con J. Kennedy Jr, aparecida en el diario El País (6/05/2012).  La utilizo, por ejemplo, cuando los jóvenes deportistas  tienen importantes percances negativos o se lesionan:  “Es bueno que aprovechas esta situación tan dura como inoportuna para seguir mejorando tu tolerancia a la adversidad, porque los males nunca son oportunos y, cuando llegan, sólo se puede aceptarlos y mirar para adelante, ya que es la mejor y la única manera de afrontarlo y de aprovecharlo como una oportunidad para mejorar”.
Se pueden quedar con la parte negativa que tienen dichas situaciones adversas, pero también se pueden alegrar de cómo van evolucionando y de que pronto estarán de nuevo entrenando a tope, y esto sí que está en su mano.  La cuestión es buscar, incluso en extrema adversidad, lo que pueda aportar para mejorar y beneficiarse de ello.  

Lo importante es hacer todo lo posible para que  las cosas salgan de otra manera pero, a partir del instante en que suceden,  se debe estar orgulloso y satisfecho por haberlo intentado con todas las fuerzas, porque  ya es el momento de tener un buen estado de ánimo, de alegrarse y de cargarse de deseo para retomar los entrenamientos y recuperar el estado de forma.
Esto es lo que pensaba una  joven deportista que tuvo un grave accidente que le impidió competir en toda la temporada. "He estado casi toda la temporada recuperándome de una lesión que sufrí a finales de enero, pero ahora ya estoy bien, ilusionada, muy contenta y con ganas de afrontar la siguiente temporada".