lunes, 26 de octubre de 2015

el valor de un acto se juzga por su oportunidad (Lao-tsé)

          Antigua e interesante reflexión que  cobra sentido especial en el fútbol actual, sobre todo en el aspecto ofensivo, dado que las oportunidades que se generan durante el juego son enormemente efímeras, y el valor de la oportunidad para aprovecharlas es imprescindible para alcanzar el éxito.
          Los desmarques de ruptura, los pases al espacio, el juego al primer toque, los remates a portería según llega el balón y otras muchas situaciones existentes durante el partido, sólo adquieren peligrosidad para el equipo adversario si van acompañadas de altas dosis de oportunidad.
          En estos casos la oportunidad debe conjugar dos elementos inseparables, por un lado la decisión adecuada y, por otro, el tiempo de ejecución porque, como hemos señalado más arriba, las situaciones se crean en un instante y desaparecen al siguiente. También en numerosos momentos de otras modalidades deportivas como, por ejemplo, cambiar el ritmo, seguir a una adversaria, aprovechar un hueco para adelantar a los que van por delante, son acciones que están impregnadas de oportunidad.