La
psicología positiva identifica,
dentro de las fortalezas del carácter, algunas cualidades que se relacionan con
la “ambición armónica”, como son
la perseverancia, la valentía, el entusiasmo, la capacidad de liderazgo y la
esperanza. Considerada la ambición,
desde ésta perspectiva, es una valiosa herramienta de progreso para el ser
humano. Pero la cuestión es, ¿hasta qué punto estamos dispuestos a actuar por
conseguir algo? y ¿qué precio estamos dispuestos a pagar o hacer que lo paguen
otros?.
Porque, la otra cara de la ambición, “la
obsesiva”, es más conocida, está más extendida desde la antigüedad, y se encuentra asociada a la
codicia, a la falta de integridad y de respeto hacia los demás, con un
insaciable deseo de poseer más a cualquier precio, que implica sobrevaloración
de uno mismo y desconsideración de los demás. El codicioso se
considera merecedor de aquello que desea por tener más méritos, poder o estatus
que el prójimo, a cualquier precio: “ el fin justifica los medios”.
También existen personas que no desean cambios ni mejoras en su vida, que no buscan nada nuevo con la suficiente fuerza como para que les motive a establecer una ruta para conseguirlo. Si es una elección libre relacionada con un sentimiento de tranquilidad o plenitud (autorrealización), es una opción positiva. Pero, si por el contrario, se vincula con la dejadez, la holgazanería, el miedo a salir de la zona de confort, el derrotismo, o la dificultad para identificar qué es lo que realmente les interesa de la vida, deberían prestarle atención a sus propios intereses, para encontrar algo que les apasione.
También existen personas que no desean cambios ni mejoras en su vida, que no buscan nada nuevo con la suficiente fuerza como para que les motive a establecer una ruta para conseguirlo. Si es una elección libre relacionada con un sentimiento de tranquilidad o plenitud (autorrealización), es una opción positiva. Pero, si por el contrario, se vincula con la dejadez, la holgazanería, el miedo a salir de la zona de confort, el derrotismo, o la dificultad para identificar qué es lo que realmente les interesa de la vida, deberían prestarle atención a sus propios intereses, para encontrar algo que les apasione.