viernes, 1 de agosto de 2014

el desarrollo y la mejora de las funciones ejecutivas traslada a los deportistas del lamento al cumplimiento.

       Por un lado, todavía  se manifiestan entrenadores en contra de la importancia del trabajo psicológico orientado al alto rendimiento, como si fuera una cuestión de creer o no creer; por otro,  en demasiadas ocasiones oímos frases como “ si hubiera presionado más”…. “si hubiera ido al despeje”.., o “si hubiera continuado marcando al jugador no hubiera rematado”, siempre lamentándose. Esta cuestión nos ayuda a reflexionar sobre la trascendencia del desarrollo de las funciones ejecutivas.
           Pero, para entrenarlas y mejorarlas, hay que considerar cuatro aspectos  de naturaleza funcional. El primero es la asociación, es decir, el cerebro siempre esta asociando hechos y comportamientos de nuestra existencia y, en este sentido, será importante establecer una adecuada relación entre  las posibles situaciones de competición con acciones de eficiente resolución. 
          En segundo lugar, la repetición para  interiorizar y reforzar mentalmente las acciones indicadas, naturalmente repetición con variación semejante al trabajo práctico. La disposición es el tercer aspecto que pone a punto las estructuras mentales específicas  y las actualiza a través del visionado y de la visualización. Las imágenes que nos muestran las soluciones, sobre todo cuanto se acerca la competición, serán el contenido predominante  en el que se ocupará de la actividad mental.  
        Y, finalmente, la ejecución muestra cómo la actividad cerebral es permanente y constante, sin descanso, de noche y de día, siempre vigilante, generando pensamientos e ideas, tomando decisiones y ejecutando acciones. Por eso, a la actividad cerebral no consciente, hay que inducirle a que se ocupe de cosas que nos sean de utilidad, de forma deliberada, si no, corremos el riesgo de que funcione libremente, sin sentido, sin intencionalidad dirigido por el azar, en cuyo caso se convertirá en el dueño de nuestro destino. Es una propuesta para mejorar las habilidades mentales relacionadas con las funciones ejecutivas.