el fútbol es un segundo.

Mi juego es muy intuitivo, de adelantarme a lo que va hacer el contrario, saber  dónde vas a darla antes de tenerla. Cuando estás en el campo es el jugador el que debe decidir. Hay patrones de juego, táctica, pero el fútbol es el momento, tomar decisiones al instante: “El fútbol es un segundo”. Son las declaraciones realizadas  y publicadas en el diario El País (6/01/13) por el jugador del Barcelona, C.F.,  Andrés Iniesta,  nombrado mejor jugador de la pasada Eurocopa y mejor jugador de la FIFA 2012

Yo juego como juego porque me sale, eligiendo en cada momento la opción que intuyo que me ofrece el juego y, si sale bien, te quedas satisfecho. Es una excelente combinación entre el pensamiento intuitivo y la toma de decisiones rápidas, que permiten al jugador rendir al máximo nivel. La visualización,  la confianza y la planificación de las acciones son las capacidades psicológicas que se pueden desarrollar con el entrenamiento que, ensambladas en el plan integral de competición,  permitirán realizar el ajuste entre el pensamiento intuitivo y la toma de decisiones rápida de forma eficiente durante el juego.

lo importante no es llegar al éxito, si no disfrutar del camino.

Son las declaraciones realizadas  y publicadas en el diario El País (6/01/13) por el jugador del Barcelona, C.F.,  Andrés Iniesta,  nombrado mejor jugador de la pasada Eurocopa y mejor jugador de la FIFA 2012. 

Y continua: “Lo que más valoro es la seguridad a la hora de afrontar el partido, a partir de eso, disfruto mucho más ahora que antes, porque la ideas que tengo del juego es lúdica, natural, la del colegio de Fuentealbilla.”

Además señala que no es importante el éxito sino el camino que recorres, no es la meta a la que llegas, porque eso no te deja poso en la vida. “Es como cuando el partido acaba y lo que te llena es una sensación de haber sido feliz jugando, de lo que has intentado y el empeño que has puesto para que te salieran las cosas. La victoria y la derrota están muy cerca y eso no lo puedes controlar”. 
Y finalmente comenta que todo es mejorable,  que espera jugar mejor cada año, y que nunca alcanzas el máximo, pero que disfruta con lo que hace y con lo que tiene. Como podemos constatar a lo largo de sus declaraciones,  este jugador es un excelente ejemplo de estilo motivacional autodeterminado y centrado en la tarea.