Durante la última semana me ha llamado poderosamente la atención esta actitud que tienen algunos jugadores de futbol, “lo tiro yo”, cuando se señala un penalty favorable a su equipo. Concretamente en los equipos del Athletic de Bilbao y de la Real Rociedad, dos jugadores se adelantaron a sus compañeros con esta actitud y al lanzarlos, en ambos casos, no consiguieron marcar gol.
Parecer ser que, una de las razones es que “estoy con confianza”, pero no vale sólo eso: ¿ha entrenado los lanzamientos durante la última semana? ¿tiene información del comportamiento del portero? ¿cómo hace la transición del pensamiento reflexivo al intuitivo en el momento de ejecutarlo? ¿la conoce? ¿la ha practicado? Y hay más cuestiones que se deberían tener en cuenta.
Además, ¿tienen más probabilidades de conseguir el éxito que los encargados de lanzarlos? ¿cómo le afecta al rendimiento colectivo del equipo esta acción fallida?. Este tipo de decisiones deberían estar fuera de las opciones posibles en competición. Otra cuestión es que un determinado jugador pida permiso para lanzarlo y, si le autorizan lo lance, en cuyo caso la responsabilidad de la acción es compartida, porque la decisión también lo ha sido.
Parecer ser que, una de las razones es que “estoy con confianza”, pero no vale sólo eso: ¿ha entrenado los lanzamientos durante la última semana? ¿tiene información del comportamiento del portero? ¿cómo hace la transición del pensamiento reflexivo al intuitivo en el momento de ejecutarlo? ¿la conoce? ¿la ha practicado? Y hay más cuestiones que se deberían tener en cuenta.
Además, ¿tienen más probabilidades de conseguir el éxito que los encargados de lanzarlos? ¿cómo le afecta al rendimiento colectivo del equipo esta acción fallida?. Este tipo de decisiones deberían estar fuera de las opciones posibles en competición. Otra cuestión es que un determinado jugador pida permiso para lanzarlo y, si le autorizan lo lance, en cuyo caso la responsabilidad de la acción es compartida, porque la decisión también lo ha sido.